jueves, 4 de diciembre de 2014

Triángulo de Floyd





El Triángulo de Floyd, llamado así en honor a Robert Floyd, es un triángulo rectángulo formado con nùmeros naturales. Para crear un triángulo de Floyd, se comienza con un 1 en la esquina superior izquierda, y se continúa escribiendo la secuencia de los números naturales de manera que cada línea contenga un número más que la anterior:
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
Una de los ejercicios más comunes en los cursos de introducción a la programación de ordenadores consiste en escribir un pequeño programa que produzca este triángulo. El triángulo de Floyd tiene varias propiedades matemáticas interesantes. Los números del cateto de la parte izquierda forman la secuencia de los números poligonales centrales, mientras que los de la hipotenusa nos dan el conjunto de los números triangulares. La suma de los números de la línea n equivale a n(n2 + 1)/2 (sucesión A006003 en OEIS).

sábado, 29 de marzo de 2014

Cual es el lugar mas frío del universo?




 El lugar más frío del Universo está dentro de la nebulosa Boomerang. Esta nebulosa se encuentra en la constelación de Centauro, a 5.000 años-luz de la Tierra. La nebulosa planetaria se formó alrededor de una brillante estrella central cuando expulsó gas en las últimas etapas de su vida.  

La Nebulosa Boomerang.


La Nebulosa Boomerang es una protonebulosa planetaria en la constelación de Centaurus que se encuentra a unos 5000 años luz de distancia de la Tierra. Es una estrella o sistema estelar evolucionando hacia la fase de nebulosa planetaria.

Distancia a la Tierra: 5.000 años luz
Ascensión recta: 12h 44m 45s

La Nebulosa Boomerang es uno de los lugares más extraños del Universo. En 1995, utilizando el Telescopio Sueco Submilimétrico de ESO de 15 metros en Chile, los astrónomos Raghvendra Sahai y Lars-Åke Nyman revelaron que ese es el lugar más frío en el Universo que ha sido detectado. Con una temperatura de -272°C, es sólo un grado más cálido que el cero absoluto (la temperatura más baja posible). Incluso los -270°C del resplandor de fondo del Big Bang son más cálidos que esta nebulosa. Es el único objeto encontrado hasta ahora que tiene una temperatura más baja que la radiación del fondo cósmico.


La forma de corbata de la nebulosa parece haber sido creada por un fuerte viento, de unos 500 km/h, arrastrando gas ultrafrío desde la moribunda estrella central. La estrella ha estado perdiendo hasta una milésima de una masa solar de material por año durante 1.500 años, dicen los astrónomos. Esto es 10 a 100 veces más que en otros objetos similares. La rápida expansión de la nebulosa ha permitido que se convierta en la región más fría conocida en el Universo.
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La NASA capta una imagen de la posible semilla de un agujero negro





El Explorador Infrarrojo de Campo Amplio de la NASA, el telescopio WISE, ha permitido localizar lo que parece ser la semilla cósmica desde la que luego brotará un agujero negro, esa porción finita del espacio en cuyo interior existe una concentración de masa tan elevada que ninguna partícula material, ni siquiera la luz, puede escapar de ella.

Los investigadores buscaban agujeros negros en galaxias “enanas”, las cuales pueden ofrecer una visión de los viveros de los agujeros negros supermasivos, objetos muy poderosos que forman parte del corazón de todas las galaxias y cuya masa es del orden de millones o miles de millones de masas solares.

Los científicos apuntan a que los agujeros negros supermasivos actuarían como un motor de las galaxias, pero aún se desconoce mucho sobre ellos. Ahora, gracias a este estudio los científicos descubrieron que los agujeros negros no necesitan una colisión para hacerse voluminosos tal y como se creía, ya que los agujeros negros de las galaxias enanas son más grandes de lo que se esperaba, lo que sugiere que las fusiones de galaxias no son necesarias para crear grandes agujeros negros.

Según lo publicado en la revista Astrophysical Journal, los agujeros negros supermasivos pueden pueden formarse muy temprano en la historia del universo o crecer en armonía con sus galaxias anfitrionas alimentándose del gas circundante, por lo que la teoría de las colisiones galácticas para incrementar el tamaño de un agujero negro supermasivo quedaría descartada gracias a este descubrimiento.



lunes, 29 de julio de 2013

Bío...¿qué? Biotecnología, el futuro llegó hace rato





Este libro muestra de manera sencilla y amena los cambios que la biotecnología está generando en la sociedad y, especialmente, en la producción industrial y agropecuaria, y confirma que el futuro ya está entre nosotros. Alberto Díaz, un pionero de las investigaciones biotecnológicas en la Argentina, cuenta aquí las aventuras científicas reales y posibles que pueden transformar para siempre el mundo tal como lo conocemos. En muy poco tiempo, la tecnología ha logrado la manipulación de organismos vivos con fines variados: desde la creación de plantas más nutritivas y resistentes a las plagas hasta bacterias limpiadoras de contaminantes, vacas con leche-remedio, supertomates y usos asombrosos de la información contenida en el ADN. La tecnología también trae consigo una avalancha de nuevas industrias, nuevas profesiones, nuevas cuestiones morales y nuevas relaciones entre actores que, como los científicos y los empresarios, hasta ayer nomás se saludaban desde lejos. 

128 págs. | 19 x 13,5
ISBN 978-987-1220-29-8
noviembre de 2005


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La luna llena empeora nuestro sueño


Como si de una criatura legendaria se tratara, el ciclo de la luna repercute en nuestra conducta nocturna. Científicos de la Universidad de Basilea han demostrado lo que hasta ahora era una mera creencia popular: la calidad de nuestro sueño varía según la posición de la luna y empeora en periodo de luna llena. Es decir, los biorritmos humanos se adaptan al ritmo astronómico.

Durante el experimento y para descartar la influencia de la cantidad de luz percibida durante la noche, se analizaron diversos aspectos como la estructura del sueño, la actividad encefalográfica durante la fase REM y la secreción de melatonina y cortisol. Para evitar la predeterminación, investigadores y voluntarios no fueron en ningún momento conscientes del objeto del estudio.

Los resultados de la investigación fueron muy reveladores: en días próximos a la luna llena, la actividad encefalográfica disminuyó un 30 por ciento, el tiempo para conciliar el sueño se incrementó en cinco minutos y la duración total se redujo 20 minutos. Estos cambios se asociaron con una disminución subjetiva del sueño y de la cantidad de melatonina segregada.

El ciclo de la Luna se caracteriza por cuatro fases visibles desde la Tierra: luna nueva, cuarto creciente, luna llena y cuarto menguante, y se completa en aproximadamente 29,5 días. Ya se había demostrado la relación entre las fases de la luna y la actividad genética y molecular en ciertas especies marinas (ritmicidad circalunar), pero es la primera vez que se extrapola al ser humano. En cualquier caso el estudio solo contó con 33 participantes por lo que deberán realizarse nuevos análisis que certifiquen la investigación publicada en la revista Current Biology.

sábado, 20 de julio de 2013

Detectan una línea de nieve en un sistema solar en formación

Por primera vez se ha obtenido una imagen de una línea de nieve en un remoto sistema planetario sumamente joven.
La línea de nieve, situada en el disco que rodea a la estrella de tipo solar TW Hydrae, promete revelar información sobre la formación de planetas y cometas, los factores que influyen en su composición, y la historia de nuestro Sistema Solar. Los resultados se publicaron ayer en la revista Science Express.

Utilizando el telescopio Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA) de Chile, los astrónomos han obtenido la imagen de la línea de nieve en un sistema planetario bebé.

En la Tierra, las líneas de nieve se forman a grandes altitudes en las que las temperaturas, al bajar, transforman la humedad del aire en nieve. Esta línea puede verse claramente en una montaña, en la que vemos bien delimitada la cumbre nevada y la zona en la que comenzamos a distinguir la superficie rocosa, libre de nieve.

Las líneas de nieve en torno a estrellas jóvenes se forman de un modo similar, en las regiones más alejadas y frías de los discos a partir de los cuales se forman los sistemas planetarios. Comenzando en la estrella y moviéndose hacia fuera, el agua (H2O) es la primera en congelarse, formando la primera línea de nieve.

Más allá de la estrella, a medida que la temperatura cae, otras moléculas más exóticas pueden llegar a congelarse y convertirse en nieve, como es el caso del dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4), y el monóxido de carbono (CO).

A 175 años luz de la Tierra
Estos diferentes tipos de nieve dan a los granos de polvo una cobertura externa que ejerce como pegamento y juega un papel esencial a la hora de ayudar a estos granos a superar su habitual tendencia a romperse tras una colisión, permitiéndoles, por el contrario, convertirse en piezas fundamentales para la formación de planetas y cometas. La nieve, además, aumenta la cantidad de materia sólida disponible y puede acelerar de forma sorprendente el proceso de formación planetaria.

Cada una de estas diferentes líneas de nieve — para el agua, el dióxido de carbono, el metano y el monóxido de carbono — puede estar relacionada con la formación de diferentes tipos de planetas.

Por ejemplo, los planetas rocosos y secos se forman en la parte interior de la línea de nieve del agua (más cerca de la estrella), donde solo puede existir el polvo. En el otro extremo se encuentran los planetas gigantes gaseosos, que se forman más allá de la línea de nieve del monóxido de carbono.

Alrededor de una estrella parecida a nuestro Sol, en un sistema solar similar, la línea de nieve del agua se correspondería con la distancia que hay entre las órbitas de Marte y Júpiter, y la línea de nieve del monóxido de carbono se correspondería con la órbita de Neptuno.

La línea de nieve detectada por ALMA es la primera detección de una línea de nieve de monóxido de carbono en torno a TW Hydrae, una estrella joven que se encuentra a 175 años luz de la Tierra. Los astrónomos creen que este incipiente sistema planetario comparte muchas características con nuestro propio Sistema Solar cuando tenía tan solo unos pocos millones de años.

“ALMA nos ha proporcionado la primera imagen real de una línea de nieve en torno a una estrella joven, lo cual es extremadamente emocionante, ya que esto nos habla de un periodo muy temprano en la historia de nuestro Sistema Solar”, afirma Chunhua “Charlie” Qi (Harvard-Smithsonian Center for Astrophysics, Cambridge, EE.UU.) uno de los dos autores principales del artículo, en la nota de prensa de ESO (Observatorio Austral Europeo). “Ahora podemos ver detalles antes ocultos sobre las lejanas regiones heladas de otro sistema planetario similar al nuestro”. 

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Descubren una relación entre la física cuántica y la Teoría de juegos

Investigadores de las universidades de Bristol (Inglaterra) y Ginebra (Suiza) han descubierto un vínculo profundo entre dos áreas aparentemente inconexas de la ciencia moderna: la física cuántica y la teoría de juegos.
La primera disciplina, también conocida como “mecánica cuántica”, se ocupa de los fenómenos físicos a escalas microscópicas y, por tanto, describe el comportamiento de objetos tan pequeños como las partículas subatómicas y los átomos.

Esta rama de la física ha revelado algunos fenómenos sorprendentes y contraintuitivos, como la “no localidad”, que consiste en la posibilidad de que una partícula subatómica actúe de manera simultánea y a distancia sobre otra partícula, anteriormente entrelazada ‎ con la primera.

Este hecho -que contradiría la Teoría de la Relatividad de Einstein, pues ésta señala que en el Universo existe un límite de velocidad que es el de la luz- fue respaldado a partir de la década de 1960 por el teorema del físico del CERN, John Stewart Bell.

Con él, Bell puso en evidencia el principio de las causas locales (que postula que lo que ocurre en una región del espacio no depende de variables controladas por un experimentador en otra región distante), y se dio a entender que nuestro universo es "no-local", que no tiene partes separadas (salvo para nuestra percepción); y que en él existirían unas variables desconocidas "no-locales".

Numerosos ejemplos posteriores han demostrado la no-localidad del Universo microscópico, publica la Universidad de Bristol en un comunicado: En ellos, observadores separados han realizado mediciones de pares de partículas cuánticas previamente entrelazadas, por ejemplo, de fotones.

De esta forma, han podido constatar la extraña correlación entre dichas partículas: Si un observador mide el momento de una de ellas, sabrá cuál es el momento de la otra. Si mide la posición de cualquiera de las dos, gracias al entrelazamiento cuántico y al principio de incertidumbre, podrá saber la posición de la otra partícula de forma instantánea.

Sobre la Teoría de juegos
Por su parte, la Teoría de juegos‎ - que se utiliza hoy en día en una amplia gama de áreas como la economía, las ciencias sociales, la biología y la filosofía - proporciona un marco matemático para describir situaciones de conflicto o de cooperación entre agentes racionales inteligentes. El objetivo central de esta teoría es predecir el resultado de esos procesos de conflicto o cooperación.

A principios de la década de 1950, el matemático estadounidense John Nash (inspirador de la trama de la película Una mente prodigiosa) demostró que, en el marco de la Teoría de Juegos, las estrategias adoptadas por los jugadores alcanzan un punto de equilibrio (el llamado Equilibrio de Nash ) en el que cada jugador conoce y ha adoptado su mejor estrategia, y en el que todos los jugadores conocen las estrategias de los otros.

Consecuentemente, cada jugador individual no gana nada modificando su estrategia mientras los otros mantengan las suyas. Así, cada jugador está ejecutando el mejor "movimiento" que puede, dados los movimientos de los demás jugadores. 

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30 Supernovas por segundo en todo el universo observable




La explosión de una estrella al final de su vida, esparciendo los bloques fundamentales de la vida en todas las direcciones del universo. A eso llamamos supernova. Tomen un único evento por galaxia cada 100 de nuestros años terrestres, consideren que hay al menos 100.000 millones de galaxias en el universo observable. Pero sigamos haciendo números, tomando 10.000 millones de años como el tiempo en el que el cosmos ha tenido la capacidad de formar estrellas hasta la actualidad; junten todos esos números mareantes, imaginen incontables fogonazos, cada uno eclipsando el brillo de toda una galaxia, cada uno preparando su pequeña parcela de cosmos para la vida.
Esto ha hecho el Dr. Richard Mushotzky del Space Flight Center de la Nasa. Las conclusiones nos dan una frecuencia de 1000 millones de supernovas al año, o lo que es lo mismo, 30 supernovas por segundo en el universo observable.
La Supernova 1987A, descubierta en ese mismo año, es la explosión más cercana a la Tierra detectada desde el año 1604. Situada en la Gran Nube de Magallanes, no solo ha despedido grandes cantidades de hidrógeno al espacio, helio, oxígeno, nitrógeno, azufre, hierro y silicio han pasado al medio interestelar.
El telescopio espacial Hubble ha estado observándola en el espectro óptico, ultravioleta y en el infrarrojo cercano, permitiendo medir la velocidad y composición del material eyectado, así como la cantidad de energía y de materiales pesados que se depositan en la galaxia donde ocurre el evento.
Todas estas observaciones nos están permitiendo ver la evolución de la supernova y la interacción de los materiales que despide con su entorno más cercano. Además estamos viendo los cambios en una escala de tiempo humano, algo sin precedentes hasta la fecha.






Entender estos procesos es entender el proceso evolutivo del cosmos. Averiguar como una violenta explosión estelar cambia y modela la evolución de galaxias como la nuestra es aprender sobre nuestra propia evolución.

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Gliese 504b, el primer exoplaneta que podemos ver directamente alrededor de una estrella de tipo solar


Ese puntito azul en la parte superior derecha es Gliese 504b (GJ 504b), un planeta gigante que se encuentra a 59 años luz de la Tierra girando alrededor de una estrella de tipo solar. Pero, ¿qué tiene esta imagen de especial?¿Acaso no hemos visto ya varios planetas extrasolares de forma directa? Pues sí, pero haciendo un poco de trampa. Y es que los exoplanetas que hemos podido ver directamente -como el sistema HR 8799, por ejemplo- son en realidad mundos en formación que aún brillan con su propia luz -especialmente en infrarrojo-. Gliese 504b es sin embargo un planeta mucho más 'frío', con una temperatura 'superficial' de unos 240º C, y es además el primer exoplaneta que podemos ver con nuestros propios ojos situado alrededor de una estrella como el Sol (GJ 504 es de tipo espectral G0). Hasta ahora sólo habíamos visto directamente planetas que se orbitan estrellas mucho más grandes y jóvenes. También es el primer exoplaneta que se descubre alrededor de una estrella rica en 'metales' -esto es, elementos más pesados que el helio-.

No es que Gliese 504b sea viejo, ya que su edad se estima en 100-500 millones de años, pero ciertamente es con diferencia el exoplaneta de mayor edad que hemos sido capaces de descubrir sin usar métodos indirectos como el del tránsito o el de la velocidad radial. Como la mayoría de mundos que se pueden ver directamente, Gliese 504b está situado a gran distancia de su estrella: unos 6525 millones de kilómetros (43 UA), lo que es bastante si lo comparamos con los 4500 millones de kilómetros (30 UA) de la órbita de Neptuno. Y, como la mayoría de planetas gigantes situados a esta distancia, pone en jaque el mecanismo de formación de planetas conocido como acreción de núcleo, favoreciendo por tanto el otro modelo rival, basado en la inestabilidad gravitatoria. Pero también es perfectamente posible que GJ 504b haya migrado al exterior del sistema por culpa de interacciones gravitatorias con otros hipotéticos planetas interiores.

Lamentablemente, al haber sido descubierto mediante visión directa resulta difícil determinar la masa de este planeta, pero se cree que podría oscilar entre 3 y 8,5 veces la masa de Júpiter. Todo indica además que GJ 504b posee un color azulado, lo que podría ser señal de la presencia de una atmósfera con pocas nubes y haría de este mundo un candidato ideal para futuras observaciones espectroscópicas. GJ 504b ha sido descubierto por el equipo del proyecto SEEDS (Strategic Explorations of Exoplanets and Disks with Subaru- Exploraciones Estratégicas de Exoplanetas y Discos de Polvo con Subaru) del telescopio japonés Subaru. Entre marzo de 2011 y mayo de 2012, el equipo de SEEDS observó el objeto en infrarrojo para asegurarse de que realmente está en órbita de GJ 504 y que no se trata de un cuerpo independiente. Ahora ya podemos decir que hemos visto -pero visto 'de verdad'- un planeta alrededor de una estrella de tipo solar.

viernes, 28 de junio de 2013

Mc Fly Hoy

La fecha de la imagen lo dice todo...



miércoles, 13 de marzo de 2013

Los mejores libros de ciencias






La revista americana Discover ha publicado en su última edición una lista con los que consideran los 25 mejores libros científicos de la historia, conformando una serie de clásicos que van desde el 330 a.C. hasta el año 1985 de nuestra era.
Además, durante una semana se han recopilado 800 firmas de visitantes de la edición on-line de la publicación, para conformar una segunda lista, de un interés más limitado, en la que ha entrado la propia Biblia.
La lista es, como todas discutibles y limitada, pero no hay duda de que los títulos que recoge forman parte, en su mayoría, de la cultura general de cualquier aficionado o profesional de la ciencia. Los 25 títulos son, ordenados por según el criterio de relevancia otorgado por la revista, son los que siguen:

  • El Viaje del Beagle, de Charles Darwin

  • El Origen de las Especies, de Charles Darwin

  • Philosophiae Naturalis Principia Mathematica, de Isaac Newton

  • Diálogo sobre los dos Sistemas del Mundo, de Galileo Galilei

  • De Revolutionibus Orbium Coelestium, de Nicolás Copérnico
  • Física, de Aristóteles

  • De Humanis Corporis Fabrica, de Andrés Vesalio

  • Relatividad: Teoría Especial y General, de Albert Einstein

  • El Gen Egoísta, de Richard Dawkins

  • Uno, dos, tres… el Infinito, de George Gamow
  • La Doble Hélice, de James D. Watson

  • ¿Qué es la Vida?, de Erwin Schrödinger

  • La Conexión Cósmica, de Carl Sagan

  • Las Sociedades de los Insectos, de Edward O. Wilson

  • Los Primeros Tres Minutos, de Steven Weinberg

  • La Primavera Silenciosa, de Rachel Carson

  • La Falsa Medida del Hombre, de Stephen Jay Gould

  • El Hombre que Confundió a su Mujer con un Sombrero, de Oliver Sacks

  • Los Diarios de Lewis y Clark, de Meriwether Lewis y William Clark

  • The Feynman Lectures on Physics, de by Richard P. Feynman, Robert B. Leighton y Matthew Sands

  • El Comportamiento Sexual en el Hombre, de Alfred C. Kinsey

  • Gorilas en la Niebla, de Dian Fossey

  • Under a Lucky Star, de Roy Chapman Andrews

  • Micrografía, de Robert Hooke

  • Gaia, de James Lovelock

Descubren un cúmulo estelar de 20.000 masas solares cerca de la Tierra





Investigadores del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), la Universidad de La Laguna (ULL) y el Centro de Estudios de Física del Cosmos de Aragón (CEFCA) han descubierto un cúmulo estelar masivo cercano a la Tierra. El nuevo cúmulo, llamado Masgomas-1, tiene unas 20.000 masas solares, el doble de la masa de Trumpler 14, el cúmulo de estrellas conocido más próximo a nuestro planeta. En la Vía Láctea solo se conocen en la actualidad una decena de estos cúmulos masivos del centenar que se calcula que existen. Son ellos los que marcan el ritmo de la actividad de formación estelar.

Masgomas-1 es un cúmulo masivo abierto que contiene más de 60 estrellas jóvenes y masivas que se mantienen juntas por la fuerza de la gravedad. Se ubica en la Vía Láctea a 11.500 años luz de la Tierra, en dirección al centro galáctico, en el brazo de Escudo-Centauro (Scutum-Centarus) y algo alejado de la base que une ese brazo con la barra de la galaxia.

Los cúmulos estelares son grupos de estrellas que se formaron en una misma época a partir de la misma nube molecular de gas y polvo. Los cúmulos abiertos, como el recién descubierto, contienen menos estrellas y más jóvenes, son menos densos que el otro tipo de cúmulos existentes, los globulares, con mayor densidad y cientos de miles de estrellas viejas (evolucionadas). Un cúmulo estelar abierto que se puede observar a simple vista desde la Tierra son las Pléyades.

Hasta hace poco tiempo, se suponía que nuestra galaxia, la Vía Láctea, estaba formando estrellas a un ritmo más lento del que le correspondía por su tamaño y características. Era, en términos de formación estelar, “una galaxia perezosa”, según la describe el astrofísico del IAC Artemio Herrero. Esta situación comenzó a cambiar a mediados de los años noventa, cuando empezaron a proliferar los datos tomados en el espectro infrarrojo. “La luz infrarroja es capaz de atravesar las nubes de polvo que oscurecen el plano de nuestra galaxia, donde se concentra la formación de nuevas estrellas. Esta formación se revela por medio de las estrellas más masivas, que viven poco, y marcan por tanto el lugar donde las estrellas se han formado recientemente, o se están formando aún”.

El descubrimiento de Masgomas-1 se ha realizado gracias a las observaciones con el espectrógrafo infrarrojo LIRIS, instalado en el telescopio William Herschel del Observatorio del Roque de los Muchachos del IAC, en La Palma. Los datos infrarrojos de los últimos años han permitido descubrir nuevos cúmulos de estrellas jóvenes e indican que la Vía Láctea es en realidad una máquina muy eficiente de formar nuevas estrellas.


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Las flautulencias de los dinosaurios calentaron la Tierra prehistórica






Los dinosaurios saurópodos podrían haber producido suficiente gas metano de efecto invernadero con sus flautulencias para aumentar la temperatura del planeta hace millones de años, provocando su propio "calentamiento global", según un estudio que publica la revista Current Biology.

Los saurópodos, conocidos por su enorme tamaño y su largo cuello, eran dinosaurios hervíboros que habitaban el planeta hace 150 millones de años. De manera similar a las actuales vacas, contaban en sus aparatos digestivos con microbios productores de metano que les ayudaban a digerir las plantas de las que se alimentaban. Ahora, un modelo matemático ha permitido a Dave Wilkinson y sus colegas de la Universidad John Moores de Liverpool (reino Unido) calcular que los gigantescos reptiles producían más metano que todas las fuentes naturales actuales y artificiales juntas.

Para llegar a esa conclusión, los científicos analizaron la producción de metano por parte de distintos animales modernos y crearon una ecuación matemática que predice cuánto metano produciría un animal conociendo su tamaño. Un saurópodo medio pesaba 20.000 kilogramos y vivía en concentraciones de una a varias decenas de adultos por kilómetro cuadrado. Con estos datos, se estima que la emisión de metano por parte de los saurópodos podría haber alcanzado hasta 520 millones de toneladas por año. Una cifra muy alta si lo comparamos con las que producen los rumiantes actuales (vacas, jirafas, cabras, etc.), que ronda las 50-100 toneladas anuales.

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jueves, 21 de febrero de 2013

El universo podría existir sin necesidad de Big Bang




Investigadores de la Universitat Politècnica de Catalunya · BarcelonaTech (UPC) han demostrado con modelos matemáticos que el universo se expande de forma acelerada debido a una pequeña constante cosmológica que actúa contra la gravedad, tal como evidencian experimentalmente las teorías cosmológicas de los últimos unos años.

En un artículo que publica la prestigiosa revista Physical Review Letters, los investigadores Jaime Haro y Jaume Amorós, del Departamento de Matemática Aplicada I de la UPC, retoman el modelo del universo introducido originalmente por Albert Einstein a finales de los años veinte en un intento de unificar la gravitación y el electromagnetismo, y aplicar esta teoría en cosmología. Los autores llegan a la explicación de dos de los principales dilemas de la cosmología actual: por qué el universo no presenta singularidades, a pesar de que la mayoría de modelos estándar predicen su existencia, y por qué la expansión del universo es acelerada, en lugar de ser decelerada como predice la cosmología basada en la teoría de la relatividad general de Einstein.

Para resolver el problema de la constante cosmológica de Einstein, los matemáticos españoles se han basado en la técnica matemática del teleparalelismo, que fue introducida en física por Einstein en los años 20. Los resultados de la investigación muestran un universo primitivo en el cual el Big Bang no existe y que evoluciona hasta nuestro universo actual, en el que una pequeña constante cosmológica actúa contra la gravedad para acelerar su expansión.


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Por primera vez miden un agujero negro considerado la "puerta de salida" del Universo




Los científicos unieron antenas de radio en Hawaii, Arizona y California para crear un conjunto de telescopios llamado "Event Horizon Telescope" (EHT) que puede ver detalles 2.000 veces más afinados que lo que es visible para el Telescopio Espacial Hubble. 

El punto de no retorno en astronomía es conocido como un agujero negro: una región del espacio donde la fuerza de gravedad es tan fuerte que nada, ni siquiera la luz, puede escapar. Los agujeros negros, que pueden ser miles de millones de veces más masivos que nuestro Sol, pueden residir en el corazón de la mayoría de las galaxias. Tales agujeros negros supermasivos son tan poderosos que la actividad en sus límites puede recorrer sus galaxias anfitrionas. 

Ahora, un equipo internacional, dirigido por investigadores del Observatorio Haystack del MIT (Instituto Tecnológico de Massachussetts), ha medido por primera vez medir el radio de un agujero negro en el centro de una galaxia distante - la distancia más cercana en la que la materia puede acercarse antes de ser irremediablemente capturada hacia el agujero negro.
Los científicos unieron antenas de radio en Hawaii, Arizona y California para crear un conjunto de telescopios llamado "Event Horizon Telescope" (EHT) que puede ver detalles 2.000 veces más afinados que lo que es visible para el Telescopio Espacial Hubble. Este sistema fue dirigido hacia M87, una galaxia a unos 50 millones de años luz de la Vía Láctea. M87 contiene un agujero negro 6.000 millones de veces más masivo que nuestro Sol. Usando esta matriz, el equipo observó el resplandor de la materia cerca del borde de este agujero negro - una región conocida como el "horizonte de suceso".
"Una vez que los objetos caen a través del horizonte de suceso, están perdidos para siempre", dice Shep Doeleman, director asistente en el Observatorio Haystack del MIT e investigador asociado en el Observatorio Astrofísico Smithsoniano. "Es una puerta de salida de nuestro universo. Se puede caminar a través de esa puerta, pero no vas a volver". Doeleman y sus colegas han publicado los resultados de su estudio esta semana en la revista Science.

Los agujeros negros supermasivos son los objetos más extremos predichos por la teoría de la gravedad de Albert Einstein - en el que, de acuerdo con Doeleman, "la gravedad va completamente loca y aplasta una enorme masa en un espacio increíblemente cercano." En el borde de un agujero negro, la fuerza gravitatoria es tan fuerte que tira de todo, desde sus alrededores.

Sin embargo, no todo lo que puede cruzar el horizonte de suceso se mete en el agujero negro. El resultado es un "atasco de tráfico cósmico", en el que el gas y el polvo se acumulan, creando una capa de materia conocida como disco de acreción. Este disco de materia orbita al agujero negro a casi la velocidad de la luz, alimentando el agujero negro con una dieta constante de material sobrecalentado. Con el tiempo, este disco puede provocar que el agujero negro gire en la misma dirección que el material en órbita.

El equipo utilizó una técnica llamada interferometría de base muy larga, o VLBI, que vincula los datos de antenas de radio ubicadas a miles de kilómetros de distancia. Las señales de las diferentes antenas, en conjunto, crean un "telescopio virtual" con el poder de resolución de un solo telescopio tan grande como el espacio entre las diferentes estaciones. La técnica permite a los científicos ver detalles extremadamente precisos en galaxias lejanas.

Usando la técnica, Doeleman y su equipo midieron la órbita más interior del disco de acreción, que resultó ser sólo 5,5 veces el tamaño del horizonte de suceso del agujero negro. 
De acuerdo con las leyes de la física, esto sugiere que el tamaño del disco de acreción está girando en la misma dirección que el agujero negro, lo que constitue la primera observación directa que confirma las teorías de cómo la energía de los agujeros negros emerge de los centros de las galaxias. 

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Descubren método para ver a través de materiales opacos




Los científicos no inventaron todavía los anteojos que permiten desnudar a la gente, pero sí anunciaron una técnica láser con la que se puede ver a través de algunos materiales, algo que interesa sobremanera a médicos y espías.

Esta técnica, todavía incipiente según sus inventores, utiliza un láser y una computadora potente. Ya permitió a un equipo de investigadores de Holanda e Italia "ver" un objeto oculto detrás de una barrera no transparente de vidrio triturado.
El mismo procedimiento permitiría ver lo que ocurre detrás de una hoja de papel o de una capa fina de pintura, aseguró a la agencia de noticias AFP Allard Mosk, del Instituto de Nanotecnologías de la Universidad holandesa de Twente.

Una vez mejorada, "en veinte años creo que dispondremos de un aparato del tamaño de un teléfono móvil que colocaremos en un material y, apretando un botón, podremos ver lo que hay detrás", estimó el físico.

Algunas sustancias, como el papel, la piel o el vidrio esmerilado parecen completamente opacas cuando en realidad dejan filtrar un poco de luz, pero una luz difusa y distorsionada que impide al ojo humano ver a través de ella.

El método, presentado en la revista británica Nature, emplea un láser que bombardea el material, en este caso un vidrio de cristal triturado que impide pasar la luz en línea directa y la dispersa en diferentes direcciones.

La luz que logra atravesar el vidrio choca contra el objeto oculto detrás de él, que la devuelve a la pared interna del cristal.

Esta luz es tan tenue y nebulosa que el ojo humano no puede interpretarla. Por el contrario, puede ser captada por un programa informático que la decodifica y reproduce una imagen del objeto oculto, explicó Allard Mosk.

"No se ve el objeto propiamente dicho, ni siquiera se ve su forma, pero gracias a nuestro método de detección, todo lo que necesitamos es conocer la cantidad de luz", precisó. Descodificar esta luz "es como un rompecabezas enorme y afortunadamente es el tipo de rompecabezas para el que están muy dotadas las computadoras".

Según el investigador, esta tecnología podría ser muy útil en la imaginología médica no invasiva y en el ámbito de las nanotecnologías, porque permitiría ver en el interior de un chip informático. "Teóricamente, se podría leer una carta dentro de un sobre, lo que no estaría mal para los espías", destacó Allard Mosk.

Pero esta técnica no podría aplicarse a los materiales negros o a los que absorben la luz, reconoció.
Tampoco permitirá crear anteojos para ver a la gente desnuda, avisó el físico. "No permitirá ver a través de algo con discreción. Uno se daría cuenta muy rápido si alguien le apunta con un láser muy potente", ironizó.

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Descubren el planeta más pequeño jamás descubierto


Kepler-37b forma parte, a su vez, de un sistema planetario también de reciente descubrimiento, el sistema Kepler-37, alrededor de una estrella "similar" a nuestro Sol y que se encuentra en la constelación Lyra, a unos 210 años-luz de la Tierra.
Según un comunicado en la página web de la NASA, el pequeño planeta y los otros dos que forman parte de su sistema se encuentran en la denominada "zona habitable" del cosmos, es decir, aquella parte en la que se considera que podría existir agua líquida.
Aun así, los astrónomos creen que Kepler-37b no dispone de una atmósfera y que, por tanto, no puede albergar vida "como nosotros la conocemos".
La NASA recuerda que los primeros planetas descubiertos que orbitan fuera del Sistema Solar (exoplanetas) eran "gigantes" y que, a medida que ha avanzado la tecnología, planetas cada vez más pequeños han sido hallados, hasta el descubrimiento de Kepler-37b que, según la agencia, demuestra que "los exoplanetas del tamaño de la Tierra son comunes".
"El hecho de que hayamos descubierto el pequeño Kepler-37b sugiere que los planetas pequeños son comunes y deja entrever que mayores maravillas planetarias nos aguardan a medida que recopilemos y analicemos más datos", aseguró el científico de la NASA Jack Lissauer.
El equipo de investigación de la NASA responsable del hallazgo usó datos compilados por el telescopio espacial Kepler, que mide de forma continua y simultánea el brillo de más de 150 mil estrellas cada media hora.

Fuente

Un toque de humor matemático


Fuente: Taringa

Eclipses 2013



Esta imagen muestra los tres eclipses lunares y dos solares que tendremos en 2013.

Fuente: Taringa

martes, 8 de enero de 2013

Calculan que hay 17 mil millones de planetas como la Tierra

 
Los astrónomos calculan que una de cada seis estrellas en nuestra galaxia tiene en órbita un planeta de tamaño similar al de la Tierra. Ello significa que hay por lo menos 17.000 millones de planetas parecidos al nuestro.

Empero, no significa que esos planetas sean habitables, pero es un síntoma esperanzador para los científicos que buscan mundos como el nuestro.

Dos grupos independientes obtuvieron cálculos similares tras un nuevo análisis de los datos aportados por el telescopio Kepler de la NASA, lanzado en el 2009 para seguir el movimiento de otros planetas. Las conclusiones fueron presentadas ayer en la Sociedad Astronómica Estadounidense de Long Beach, en California.

El objetivo ha sido desde hace tiempo descubrir un planeta de tamaño similar a la Tierra situado en la llamada zona Ricitos de Oro, un margen que no es demasiado caliente ni demasiado frío, y donde podría haber agua en forma líquida.

Por otra parte, astrónomos estadounidenses encontraron seis cometas en estrellas lejanas, según un estudio presentado ayer en la asamblea anual de la Sociedad Astronómica Estadounidense (AAS, por sus siglas en inglés) en Long Beach, estado de California.

El estudio fue realizado por un equipo liderado por Barry Welsh de la Universidad de California, en Berkeley, Estados Unidos, según reportó la agencia alemana DPA.

Los cometas son aglomerados de hielo y polvo que aparecen frecuentemente en nuestro Sistema Solar. Estas "bolas de nieve sucia" tienen un diámetro de cinco a 20 kilómetros. Por lo general, trazan su recorrido lejos del Sol. Pero si se salen de órbita y se acercan al Sol, se derriten y forman una enorme cola con el material que se desprende de ellos.

El material de esta larga nube de gas y polvo puede absorber la luz de las estrellas en determinadas longitudes de onda, lo que deja líneas oscuras características en el espectro de la luz de las estrellas.

De esta forma, el equipo liderado por Welsh encontró cometas en un total de seis estrellas en tres campañas de observación. No se trata del primer descubrimiento de cometas fuera del Sistema Solar o exocometas pues ya se conocían cuatro.

"Los exocometas son más fáciles de encontrar y más frecuentemente de lo que se pensaba hasta ahora", explicó Welsh en su informe.

Los astrónomos investigaron estrellas jóvenes del tipo espectral A, que tienen sólo cinco millones de años. Los astrónomos no observaron planetas en estas estrellas, sin embargo, estos jóvenes soles están rodeados de grandes discos de gas y polvo de los que suelen formarse planetas.

Además, los planetas -aún no descubiertos- tienen que haber arrojado a los cometas de su órbita original de modo que pudieran acercarse lo suficiente a su respectiva estrella para derretirse.

Welsh parte de la base de que con instrumentos optimizados se pueden detectar cometas en estrellas más antiguas del tipo espectral G y F, en las que fueron detectadas hasta ahora más de 850 exoplanetas.