martes, 2 de junio de 2009

Los mejores descubrimientos del telescopio especial

Dando vueltas alrededor de la Tierra, a 28,163 kilómetros por hora, el telescopio espacial Hubble ha tomado algunas de las fotografías más detalladas jamás vistas de objetos y actividades espaciales. Sin embargo, el Hubble hace mucho más que tomar fotografías bonitas. Utilizando la información que proporciona, los investigadores han dado saltos gigantescos en lo que respecta a descifrar misterios del Universo.

En honor del décimo noveno aniversario del telescopio, el pasado mes de abril, la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio de Estados Unidos (NASA, por sus siglas en inglés) ha emitido una lista de los principales 12 descubrimientos científicos logrados gracias a las imágenes del Hubble, incluyendo la fotografía del así llamado Cúmulo Bala.

En combinación con la información proporcionada por otros dos telescopios, la vista del Cúmulo obtenida por el Hubble muestra qué sucede cuando chocan dos grandes grupos de galaxias.
La imagen fue reconocida en 2006 como la primera prueba directa de la materia negra, una sustancia que todavía no ha sido identificada, pero que, se piensa, constituye la mayoría del total de la masa del universo.

“Perlas cósmicas” encontradas alrededor de la supernova No obstante que la supernova 1987A fue vista por primera vez hace dos décadas, el Hubble es el único observatorio existente que puede mostrar cada “cuenta” del inusual collar de la estrella muerta, tal como se ve en la fotografía del 2006.

El material rosado en medio del anillo son escombros que quedaron cuando explotó la enorme estrella. Los astrónomos piensan que el anillo es una capa externa de materia que la estrella había soltado 20.000 años antes de que muriera. El impacto de onda de la explosión actualmente está calentando regiones de ese anillo, creando las “perlas” brillantes.

Adivinando la edad del universo Semejante a un festival de luciérnagas, la imagen de estrellas enanas blancas viejas tomada en 2002 por el Hubble ayudó a los astrónomos a identificar la edad del Universo con precisión histórica.

Las estrellas enanas blancas son los densos centros que quedan cuando estrellas parecidas al sol mueren. Al medir la luz de algunas de las estrellas enanas blancas conocidas de mayor antigüedad se reveló que las estrellas extinguidas tienen entre 12 y 13 mil millones de años.
Desde entonces, los astrónomos han combinado esa información con aproximaciones de edad provenientes de modelos teóricos sobre la expansión del universo, así como con medidas más recientes de la radiación difusa liberada justo después del “big bang”.

Los científicos ahora afirman con certeza que el Universo tiene 13.700 millones de años, más menos unos cuantos cientos de miles de años.

Júpiter es golpeado Al unir dos imágenes del Hubble se observa un “tren” compuesto por pedazos del cometa P/Shoemaker-Levy 9 apuntando a Júpiter en mayo de 1994 -un mes antes de que cerca de 20 pedazos del moribundo cometa impactara en el hemisferio meridional del gigante de gas-.

El planeta sobrevivió al ataque relativamente sin marca alguna, aun cuando cada golpe generó la misma cantidad de energía que sería liberada si explotaran al mismo tiempo todas las bombas atómicas de la Tierra.

Plutón se hace de amigos En el año 2005, el Hubble detectó dos débiles lunas alrededor de Plutón, elevando a tres el número de compañeros orbitales del ex planeta. La única luna de Plutón que se conocía previamente era Charon y fue descubierta en 1978.

Apodadas Nix e Hydra, las dos nuevas lunas son cerca de 5.000 veces más pálidas que Plutón.
Dejando cierto sinsabor, el Hubble también jugó un papel importante en la degradación de Plutón a su actual estatus de planeta enano. Las imágenes del Hubble ayudaron a los astrónomos a percatarse de que uno de los vecinos de Plutón, Eris, tiene un cuerpo más grande, alimentando un acalorado debate sobre qué es lo que define a un planeta. National Geographic News

1 comentarios:

Anónimo dijo...

hermosa foto